+ Incapaz e insensible, la PGJ CDMX
+ ¿Qué pasó con el novio?
La historia de Pamela Gallardo Volante se puede resumir así: desapareció en El Ajusco el 5 de noviembre de 2017 durante un festival de música y, hasta la fecha, la Procuraduría de Justicia de la CDMX ha sido incapaz, omisa y sospechosa, al no poder resolver este doloroso caso que tiene destrozada a otra familia mexicana.
Incapaz, porque no ha podido construir una investigación sólida que lleve a aclarar esta tragedia.
Omisa, porque ha ignorado información muy valiosa de testigos e investigaciones de la propia familia, en torno a los últimos minutos durante los cuales se vio a Pamela en El Ajusco.
Sospechosa, por la benevolencia con la que ha tratado a Jesús Zamora, novio de Pamela, quien es personaje clave para determinar qué ocurrió con la joven de 23 años de edad, cuya familia es de comerciantes en el mercado del zapato Tepito 60.
Sí, la Procuraduría de Justicia que encabeza Edmundo Garrido y que es la misma que ha fabricado culpables, como ocurrió recién con el caso del actor Axel Arenas, presentado como presunto asesino de la modelo Karen Ailén Grodzinski cuando, en realidad, Axel estaba fuera del país. (El sello de Miguel Ángel Mancera cuando fue procurador fue, precisamente, ese: fabricar culpables, como fueron los casos de Lorena González del caso Martí, Charly del caso Cabañas Bar-Bar, y de la estudiante de la UNAM Mariel Solís, entre otros más).
Sí, la PGJCDMX que es figura decorativa cuando se trata de defender, ubicar o resolver las múltiples desapariciones de mujeres en la capital del país. En balde, tantos recursos económicos y materiales que recibe año tras año y que provienen de nuestros impuestos.
Sí, esa Procuraduría cuya Fuerza Antisecuestro (FAS), encabezada por Willy Zúñiga, ha sido negligente y hasta ofensiva con los familiares de Pamela Gallardo cuando van a pedir información sobre las investigaciones. A la incapacidad policiaca se suma la insensibilidad humana.
Se cumplieron ayer 100 días de la desaparición de Pamela. Y nada. Cero avances. Cero investigaciones. Cero información.
Por eso, como lo publicamos en nuestra columna del pasado 15 de noviembre, hoy volvemos a plantear:
¿Dónde está Pamela Gallardo Volante?
Desde la desaparición de Pamela el 5 de noviembre de 2017 en El Ajusco, a media tarde, tras asistir junto con su novio Jesús Zamora al Soul Tech Festival 2017, hay varios puntos a considerar- algunos francamente hasta indignos-, y que estamos en condiciones de plantear al respecto.
EL TESTIGO. Hay un testigo ocular que ya realizó su declaración ministerial de manera valiente. Un ciudadano ajeno a Pamela y a su familia, y que asegura que Jesús se llevó a Pamela no hacia los camiones para regresar a casa, como lo ha reiterado el propio Jesús, sino que, junto con otros dos sujetos, enfilaron junto con Pamela hacia la carretera Picacho Ajusco. Jamás se le volvió a ver. ¿Quiénes eran esos dos tipos que iban con Jesús y a dónde se llevaron realmente a Pamela? Hasta ahora, la PGJCDMX ha desestimado lo dicho por ese testigo, del cual nos reservamos su identidad, ya que, asegura la procuraduría, “es su palabra contra la de Jesús”. ¡Es inconcebible! ¿Y desde cuándo se desecha con tamaña irresponsabilidad lo declarado por un testigo presencial?
DOS TIPOS. Jesús Zamora ha mencionado, durante interrogatorio, dos nombres: el de un tal Alexis, y otro apodado “El flaco”, que coincidieron con él en El Ajusco y a quienes ya conocía. ¿Quiénes son Alexis y El flaco? ¿Qué papel jugaron? ¿Ya se les identificó plenamente? ¿Ya se les buscó? ¿Ya se les interrogó? Hasta ahora, la respuesta de la Procuraduría ha sido el silencio.
MP VOLÁTIL. El expediente de la desaparición de Pamela Gallardo Volante ha cambiado…¡hasta en tres ocasiones de Ministerio Público! lo que, de forma irremediable, ha entorpecido las pesquisas y evitado armar una investigación sólida y bien sustentada. ¿Cómo lograrlo si cada mes cambia de MP?
AUTO JUSTICIA. Cuando llegaron a la Procuraduría pocos días después de desaparecida Pamela, su hermano, Esteban Gallardo, recibió por parte de la autoridad una petición tan inaudita como indignante: le pidieron que les llevara a Jesús Zamora…¡como si Esteban fuera policía! Es el colmo: ahora la PGJCDMX quiere que los ciudadanos – o peor, las víctimas colaterales, en este caso, la familia-, hagan el trabajo de los policías, llevándoles a los presuntos culpables, con el riesgo que ello conlleva.
GARRIDO AUSENTE. El procurador Garrido no se ha dignado a recibir a la familia Gallardo Volante. Estará muy ocupado. Su desprecio hacia el caso de Pamela ha sido manifiesto. “Un caso más”, dicen las autoridades. No, señores: para las familias de las desaparecidas no es un caso más. Es la tragedia más dolorosa que enfrentarán en su vida y que los marcará para siempre.
Cien días y Pamela Gallardo Volante sigue desaparecida.
Jesús Zamora, quien era el directo responsable de la seguridad de su novia, está en libertad y muy poco aporta a la investigación. Él fue el último que la vio.
La PGJCDMX no ha avanzado un milímetro en aclarar el caso.
¿Quiénes son Alexis y El flaco? ¿Por qué tanta benevolencia con Jesús Zamora? ¿A qué se debe el marcado desdén a la familia Gallardo Volante?
Lo escribí en noviembre pasado y hoy lo remarco:
Como periodista, insistiré, vía columna y mis redes sociales, en el propósito de investigar el caso y localizar a Pamela. Que la procuraduría de Justicia de la CDMX realice un trabajo profesional y se descubra qué ocurrió entre la chica y Jesús Zamora aquella tarde del domingo 5 de noviembre de 2017.
Que el procurador de Justicia de la CDMX, Edmundo Garrido, se comprometa a resolver este caso. No descansaremos hasta que se diga qué ocurrió con Pamela. Por supuesto que no cejaremos en este empeño.
Es por Pamela.
Es por su madre, Carmela.
Es por su familia.
Es, de alguna manera, por todos nosotros.
TW @_martinmoreno
FB / Martin Moreno
http://www.sinembargo.mx/14-02-2018/3385183