Con un protocolo de intervención y la campaña #AMíMeRespetas, las autoridades buscan incentivar la denuncia y erradicar el acoso
Con el hashtag #MetroSinAcoso, mujeres denunciaron en redes sociales la violencia sexual de la que son víctimas cuando viajan en este medio de transporte. También exigieron a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, una solución al problema.
“La violencia sexual es un tema tan normalizado que ni siquiera sabemos cuántas mujeres, niños y niñas son agredidos sexualmente al día… Además, cuando se denuncia, a las mujeres se nos llama exageradas, histéricas o bien las denuncias simplemente no proceden”, manifestó la usuaria Cynthia Híjar, quien detonó la iniciativa.
Poco a poco, otras mujeres comenzaron a unirse a la denuncia y publicaron sus experiencias.
El problema no es solo del Metro, sino de toda la Ciudad de México. Por ejemplo, una encuesta realizada en noviembre de 2018 a usuarios del Metrobús, revela que 13% de las mujeres sufrieron alguna clase de violencia sexual dentro de la red en los seis meses previos al levantamiento de la encuesta.
La CDMX tiene el transporte público más peligroso para las mujeres entre cinco de las urbes más grandes del planeta, según una encuesta de la Fundación Thomson Reuters.
El ejercicio encontró que tres de cada cuatro mujeres en la capital sienten riesgo de sufrir algún tipo de acoso o abuso sexual cuando viajan por Metro, Metrobús, camión, microbús…
Andrés Lajous, secretario de Movilidad de CDMX, tiene claro el problema y reconoce que es uno de los grandes males en la red por la que se desplazan a diario millones de mujeres.
“Lo tenemos identificado como uno de los principales problemas en el servicio del transporte público. Muchas veces, cuando la gente piensa en problemas en el servicio de transporte, piensa en fallas en el Metro o en aglomeraciones, pero uno de los problemas del servicio es el acoso”, señala el funcionario.
En entrevista con mexico.com, Lajous explica que el combate al hostigamiento sexual comenzó desde los primeros días de diciembre, cuando la nueva administración capitalina tomó las riendas de la ciudad. Y se tratará de una estrategia interinstitucional.
Con el cambio de gobierno, la Secretaría de las Mujeres lanzó la campaña #AMíMeRespetas en contra del acoso sexual.
En el caso específico del transporte, el secretario de Movilidad comenta que la estrategia de comunicación irá acompañada por un protocolo de intervención en el transporte.
“Sí tenemos un planteamiento de cómo hacer no solo una campaña de comunicación, que muchas veces se queda en eso, sino realmente un protocolo de intervención en el transporte y hacerlo por igual en todos los medios de transporte”, detalla.
El combate al acoso sexual en el transporte público pasa por uno de los objetivos más importantes de la nueva administración: la integración de todo el sistema de transporte de Ciudad de México.
Integrar la red no solo significa conectar estaciones que hoy no lo están, sino darle un orden y una lógica que mejore la experiencia del usuario. “Lo que le importa al usuario es dónde se sube y dónde se baja, la calidad del viaje y el tiempo que le toma”, explica Lajous.
Parte de esa integración es que se cuente con un protocolo de intervención común en caso de acoso sexual ya sea que el delito tenga lugar en el Metro, el Metrobús, el Tren Ligero o en el transporte concesionado de camiones y microbuses.