Con el uso de inteligencia artificial, la aplicación sustituye la ropa por imágenes de desnudos y solo es aplicable a fotografías de mujeres
La cara oscura del avance tecnológico nos mostró hace algunos años un nuevo término: deepfake.
El deepfake consiste en poner rostros de personas en cuerpos que no son suyos, a través de esta técnica, que emplea Inteligencia Artificial, fueron creados videos pornográficos falsos “protagonizados” por celebridades. Algunas de las víctimas conocidas del deepfake fueron las actrices Gal Gadot y Emma Watson, y la cantante Taylor Swift.
Bajo esta misma lógica, The Verge informó sobre una aplicación llamada DeepNude que utiliza inteligencia artificial que puede sustituir la ropa por desnudez en fotografías de mujeres.
Esta aplicación solo funciona cuando es empleada en imágenes de mujeres. Es capaz de reconocer las partes de la fotografía donde se encuentra la ropa y sustituirlas por imágenes de mujeres desnudas que circulan en internet o en sitios pornográficos. Así es como la app crea un “desnudo falso”, utilizando la cara de las mujeres de las imágenes, pero otros cuerpos.
El uso de la tecnología en contra de las mujeres
La existencia de este tipo de aplicaciones añade un capítulo más a los casos en los que el uso de la tecnología sirve para acosar, intimidar, discriminar y/o violentar mujeres.
La existencia de esta clase de instrumentos deriva en el uso y distribución, sin consentimiento, de imágenes íntimas sin que la víctima sepa siquiera que existen.
Hay cientos de casos en los que las fotografías íntimas son utilizadas como herramientas de control y/o chantaje contra las mujeres, por lo que la discusión sobre esta aplicación se ha centrado en cómo las imágenes producidas por ella pueden ser utilizadas para ejercer violencia contra las mujeres.
No es la primera vez que se llama la atención por el uso de tecnología en detrimento de las mujeres: en mayo de 2019, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) presentó un informe que señala que la programación detrás de asistentes de voz refuerza estereotipos sexistas y misóginos.
En ese informe, los expertos hicieron un llamado de atención crucial para evitar manifestaciones sexistas en la tecnología: desarrollar habilidades técnicas avanzadas de mujeres y niñas para que puedan dirigir la creación de nuevas tecnologías igual que los hombres.
