#MetaDatos: En las redes sociales las agresiones machistas se diversifican y amplifican no solo desde el discurso, también desde las plataformas digitales que expone a las víctimas, permite la viralización de contenidos agresivos y la conformación de grupos y comunidades que exaltan el machismo, de acuerdo con estudiosos del tema. En 2017, el colectivo Luchadoras identificó 13 formas distintas de ciberacoso. En los últimos meses estas expresiones se han intensificado conforme aumentan las movilizaciones feministas en la Red.
En los últimos meses se han intensificado los ataques en contra de los movimientos feministas en el entorno de las redes sociales. Estas agresiones se han vuelto más complejas y diversas en un contexto en que el feminismo ha alcanzado un momento de alta intensidad a nivel global.
Desde el año 2017, el colectivo Luchadoras, un grupo de activistas que aboga por un Internet libre de violencia, señaló en el informe “La violencia en línea contra las mujeres en México”, una tipología de agresiones que padecen las mujeres en la Red en la que identificaron 13 tipos distintos de ataques con las que aterrizan la problemática en el entorno mexicano, estas fueron definidas como: acceso no autorizado y control de acceso; control y manipulación de la información; suplantación y robo de identidad; monitoreo y acecho; expresiones discriminatorias; acoso; amenazas; difusión de información personal; extorsión; desprestigio; abuso y explotación sexual relacionada con las tecnologías; afectaciones a canales de expresión y omisiones por parte de actores con poder regulatorio.
Lulú Barrera, integrante del colectivo, señaló que la identificación de estos 13 tipos de ciberacoso responde a la necesidad de definir agresiones múltiples ya en que en ocasiones la terminología con la que se contaba, muchas veces proveniente de idioma anglosajón, era insuficiente para describir los ataques que implicaban más de una agresión. Algunos ejemplos son los hackeos en los que, además del robo de contraseñas, los agresores amenazan a las víctimas, intervienen sus comunicaciones, hacen pública información personal, entre otras formas de acoso.
GRUPOS EN “DEFENSA” DEL PATRIARCADO
Los ataques diversos son facilitados por la misma arquitectura de las redes sociales, cuya interfase permite que se diversifique el proceso comunicativo desde la emisión hasta la recepción de mensajes, lo que permite la difusión de diversas expresiones violentas y discriminatorias (tanto verbales como visuales), la conformación de comunidades de agresores, y la exposición de la víctima, entre otras formas de violencia que promueven un discurso de odio y misoginia contra feministas y mujeres en general.
En esta dinámica se han multiplicado los grupos de Facebook que justifican la exaltación del machismo como mecanismo para contrarrestar al feminismo, pero el fenómeno no es nuevo y lleva varios años, según explicó Magaly Gallegos, socióloga de la UAM.
“Las redes sociales no son como otra realidad, no es como una caja de resonancia que nos permite ver más fácilmente lo que está pasando en el plano analógico. Los machistas existen prácticamente desde siempre”, dijo la socióloga. “Estas personas generan más violencia y al final tienen mucho apoyo en sociedades como la nuestra con tradición a la religión y a una moral católica”.
Los grupos que surgen en Facebook con esta orientación acumulan miles de seguidores y las comunidades crecen con rapidez. Entre el 8 de julio del 2018 a septiembre de este año, la página de Facebook de nombre Patriarcado Opresor, orientada a la difusión de memes que ridiculizan las movilizaciones feministas y apoyan las posturas conservadoras, sumó más de 20 mil seguidores. Al igual que esta página, otras similares acumulan miles de seguidores.
MÁS AGRESIONES
Existen acontecimientos detonadores de expresiones discriminatorias hacia las mujeres. Fechas y eventos en las que estas comunidades incrementan su actividad, como ocurre cada año durante el 8 de marzo, en que se conmemora el Día Internacional de la Mujer y se exigen derechos como el aborto seguro y un alto a los feminicidios.
En el tema del aborto, en redes sociales surgen diversas formas de expresión, no solo en oposición al procedimiento médico, también al movimiento que exige su legalización en México y a las mujeres que lo apoyan. Este año, la discusión derivó en ataques focalizados a activistas y reactivó una tendencia que desde la Red busca oponer resistencia al feminismo a partir de la crítica de las características fisiológicas de las mujeres que forman parte de este movimiento.
Memes, fotografías, videos y otros materiales hacen eco de estas manifestaciones en la Red. Cientos de comentarios vertidos en grupos y páginas de Facebook articulan un discurso en el que se caricaturiza a las mujeres feministas como irracionales, iracundas, de escasa inteligencia.
En tanto que a través de la imagen, la misma crítica se focaliza en prácticas de monstrificación por medio de memes en los que se les compara con seres mitológicos, personajes cinematográficos y otros monstruos empleados para ridiculizar a las mujeres que abordan en la Red el tema de la cultura de la violación y el acoso callejero.
La difusión de estos contenidos se extiende por decenas de grupos de Facebook, entre los que cada vez es más recurrente el juicio que separa la lucha entre el feminismo correcto y el mal enfocado, según su percepción.
EL TÉRMINO FEMINAZIS
Desde 1992, diversas fuentes identifican a Rush Limbaugh, un conservador, republicano de origen estadounidense como el creador del término Feminazi, empleado para desacreditar el movimiento feminista por grupos que le consideran un movimiento radical que resulta dañino en la sociedad. Esta expresión ha migrado a la red.
En agosto de este año, a raíz de las movilizaciones que se abanderaron con la etiqueta #NoMeCuidanMeViolan, el término “feminazi” alcanzó en México, cifras históricas en cuanto a búsquedas realizadas por usuarios de Google. De acuerdo con la herramienta Google Trends, los memes que hacen referencia al término se encontraron entre las primeras causas de búsqueda.
Un estudio del laboratorio Signa Lab del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) analizó la movilización que desde las redes sociales realizaron colectivas feministas con la etiqueta #NoMeCuidanMeViolan y encontró varias tendencias orquestadas para afectar al movimiento.
En el análisis titulado “El Color de la Rabia”, el laboratorio de medios digitales dio seguimiento a la evolución de las movilizaciones trascendidas en Twitter del 12 al 19 de agosto y que se conectaron con las protestas llevadas a cabo en la Ciudad de México en el mismo periodo, mismas que se generaron a raíz de la indignación que provocó el caso de una joven de 17 años quien fue agredida sexualmente por cuatro policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Capital del país.
Signa Lab también encontró que se utilizó el término feminazis: “La tensión en la tuitósfera fue aumentando, en algunos momentos con hashtags no orgánicos, sino impulsados con coordinación humana y automatizada, por ejemplo #EllasNoMeRepresentan y #AsíNoMujeres, que se utilizaron para deslegitimar el movimiento, al describir los actos de protesta como ‘provocación’ o calificarlos como violentos y nuevamente la utilización del término ‘feminazi’.
TRENDING TOPICS MACHISTAS
En tanto que el debate sobre el feminismo en la Red se centra en el término feminazi y existen grupos que reducen todos sus argumentos a llamar de esta forma peyorativa a las mujeres que buscan equidad de género, las plataformas digitales son también el conducto para la expresión de un discurso machista menos visible y que permanece dentro de comunidades herméticas, donde los derechos de las mujeres no están en debate.
Una de estas expresiones es el hashtag #ViernesDeAhorcarRucas, que en el contexto de las movilizaciones feministas de agosto cobró fuerza en Twitter. Esta tendencia se ha reactivado durante varios fines de semana a partir de que se volvió viral una grabación en la que se pronunció la frase. En las redes sociales cientos de usuarios han empleado esta etiqueta para hacer apología de la violencia contra las mujeres y el feminicidio.
Este tipo de actividad tiene su origen en grupos como Legión Holk que han posicionado múltiples tendencias para exaltar el machismo en la cultura mexicana y que han sido aceptados y promovidos entre la comunidad tuitera que tomó con gracia estas frases cargadas de violencia.
AGRESIONES FOCALIZADAS
De acuerdo con Lulú Barrera, el colectivo Luchadoras recibió durante el mes de agosto más de 300 agresiones a través de mensajes privados y comentarios en sus redes sociales. Esto en el contexto de las movilizaciones para protestar contra la violencia que tuvieron lugar en el mismo mes.
De acuerdo con la activista, fueron varias los colectivos que recibieron agresiones en la Red, es el caso de La Cuarta Ola y Las del Aquelarre, cuyas integrantes fueron agredidas en sus cuentas personales, lo que indica que la violencia y el acoso a las feministas también se genera desde prácticas de vigilancia en contra de activistas.
Estas prácticas de seguimiento y hostigamiento trascienden el plano discursivo y se generan al margen de la Ley. Sin embargo, México no cuenta con mecanismos preventivos para evitarlas.
A finales de julio, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) emitió un posicionamiento contra las expresiones discriminatorias en la Red hacia figuras públicas. “El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación ve con preocupación y rechazo las expresiones discriminatorias que se han vertido en las redes sociales contra diversas personas públicas en fechas recientes. Dichas expresiones estigmatizan a las personas por su apariencia o por tener una discapacidad o por su edad y están basadas exclusivamente en prejuicios con los que se pretende descalificar a aquellas personas contra quienes se usan”, señaló el comunicado del organismo presidido por Alexandra Hass.