El juez determinó que el entonces novio de la joven fue el responsable de su asesinato, ocurrido en mayo de 2017.
Jorge Luis González fue declarado culpable del feminicidio de su entonces novia Lesvy Berlín Rivera Osorio.
La sentencia llega dos años y cinco meses después de que Lesvy fue encontrada colgada del cordón de una caseta de teléfono público, a un costado de la Facultad de Ingeniería, en Ciudad Universitaria el 3 de mayo de 2017.
Araceli Osorio, madre de la joven, dijo tras conocerse el veredicto que “hoy la verdad salió adelante, hoy empieza un camino hacia la justicia en el caso de Lesvy. ¿Cuánto tiempo tenemos que esperar para que la justicia llegue para todas y cada una de las mujeres que fueron asesinadas en este país?
“Tenemos mucho dolor pero también tenemos argumentos sólidos y verdaderos para que cada uno de estos asesinatos contra nuestras mujeres sean sancionados de manera justa. No es venganza es justicia”.
El 16 de octubre se le dictará sentencia. Durante el juicio, el Ministerio Público pidió condenar a Jorge Luis a 60 años de prisión por el delito de feminicidio agravado.
En las primeras indagatorias la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México dijo que la joven se había suicidado con el cable telefónico de la caseta luego de discutir con Jorge Luis, quien la había dejado en CU.
Sin embargo, otro peritaje presentado por el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio y realizado por un maestro en criminalística del Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE), determinó que la joven no podría suicidarse en un espacio tan reducido, porque su cuerpo no lograría suspenderse y causar la fuerza necesaria para la asfixia.
Fue entonces que tras la apelación que presentaron organizaciones se presentaron elementos suficientes para que se reclasificara el delito y que se investigara el caso con perspectiva de género.
Los alegatos del MP y la defensa
La defensa del imputado reiteró durante la audiencia que no había ninguna prueba objetiva sobre que el imputado incurrió en el hecho de privar de la vida a su novia por lo que pidieron una sentencia absolutoria.
El Ministerio Público afirmó que hubo lesiones infamantes (ofensivas) en Lesvy, cuyo cuerpo quedó expuesto al público y según los peritos recibió 17 lesiones exteriores.
Además del estado de indefensión en que se encontraba Lesvy por los niveles de alcohol y los datos de violencia física y emocional que sufrió previos al feminicidio.
Señaló que otro rasgo de feminicidio es el hecho de que el imputado amenazó con suicidarse, según uno de los testigos, así como la continua violencia que sufrió Lesvy, lo que la hizo sumisa a quien la tenía aislada, controlada y vigilada.
A su vez, la asesoría jurídica sostuvo que no hay duda de que Jorge Luis, alrededor de las 4:18 horas de esa mañana, privó de la vida a Lesvy, “no fue un desconocido, sino su pareja”.
Se señaló también que en el raspado de uñas de Lesvy se encontró sangre del imputado, lo que prueba que estranguló a la joven de 22 años de edad, así como los rasguños que descubrió la mamá de la occisa en el brazo de Jorge Luis.
Sin embargo, la defensoría pública del imputado reprochó que algunos medios de comunicación ya hayan culpado a Jorge Luis de feminicidio sin que haya una condena, ya que con ello se viola su derecho a la presunción de inocencia.
Aseguró que hubo inconsistencias de los testigos, además de que el auricular telefónico no tenía huellas de Jorge Luis, quien “es evidente que no estaba esa madrugada en condiciones de armar una escena de suicidio”.
Además, desestimó el peritaje de un especialista de Guatemala, pues argumentó que no puede ejercer en el país sin un permiso para ello, y descalificó la reconstrucción de los hechos por parte de una cirujana dentista. Afirmó que no hay una prueba categórica en que el imputado haya cometido una acción u omisión en la muerte de Lesvy al tiempo que rechazó que existan datos de lesiones difamantes y de violencia. “No fue feminicidio dado que fue una mera decisión de la ahora occisa”, indicó.