Con ingresos que no rebasan los 160 pesos diarios y en muchos casos sin acceso a agua potable, mujeres en situación de calle buscan alternativas para gestionar su menstruación.
El Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) señala que la gestión menstrual en poblaciones vulnerables es un problema que afecta los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Para el caso de las mujeres en situación de calle, un acto tan cotidiano como gestionar su regla mes a mes puede convertirse en una situación problemática e incomoda, apunta la institución.
Según los resultados de su informe “La Vida en Rojo”, presentado en el marco del Día Internacional de la Mujer, en la zona de la Ciudad de México habitan 6 mil 754 personas en condición de calle. De este grupo, 4 mil 354 habitan el espacio público y 2 mil 400 son atendidos en centros de asistencia social; el 9.93% son mujeres.
La titular de Copred, Geraldina González de la Vega Hernandez, mencionó que muchas mujeres o personas menstruantes no tienen acceso a una gestión menstrual adecuada o digna, lo que quiere decir que no cuentan con todos los elementos necesarios para vivir su menstruación de forma plena.
Las toallas sanitarias, las copas menstruales, los tampones o calzones, entran dentro de los elementos para tener una menstruación justa además de la infraestructura necesaria para la higiene como el agua e información científica sin estigmas, agrega la presidenta de este organismo institucional.
La institución puntualizó que es necesario hablar sobre la menstruación desde un sentido público. “La menstruación es un evento que le ocurre a más de la mitad de la población, mujeres, hombres trans (mujeres que hicieron su transición a hombres) y niñas menstruantes alrededor de 30 a 40 años en sus vidas y que por falta de información laica y científica ha provocado tabúes que impiden el desarrollo de sus derechos sexuales y reproductivos”, menciona la presidenta de Copred.
Trapos y papel
Trapos y papel son algunos recursos que utilizan las mujeres que viven en situación de calle para gestionar su menstruación. Testimonios proporcionados por Copred en conjunto con la organización El Caracol, revelan que comprar insumos para la regla es un gasto fuerte y más cuando se tienen bajos ingresos o ingresos nulos.
“Trapos y papel. Cuando vivía en Las Casitas, porque luego no tenía para las toallas, entonces la mitad de lo que me hacía, entonces la neta lo que me hacía la difunta Anita, que entonces en lo que ella me compraba mis toallas, este, me cortaba trapos, me decía ni pedo, güey, vas, y ya me ponía mi caballito de trapo”, cuenta una mujer en condición de calle.
“A mí sí me tocó robarle las servilletas a la de los tacos. Pues es que agarrabas lo que podías, la verdad”, detalla otra mujer.
Los costos de gestión menstrual para una mujer en condición de calle es de 100 pesos por semana, tomando en cuenta que cada toalla sanitaria cuesta alrededor de 5 pesos y que utiliza de tres a cuatro al día, por este motivo. Muchas deciden utilizar insumos como telas, trapos o papel, pues según el informe “Vida en Rojo” las mujeres en esta condición de pobreza tienen un promedio de ingresos que va desde los 50 a 157 pesos diarios y en el caso de las menos favorecidas, ingresos nulos.
Otra de las alternativas que han encontrado las mujeres en estos sectores es comprar toallas sanitarias grandes o con capacidad de flujos abundantes para usar menos. Sin embargo, el informe detalla que esto ha provocado infecciones debido al uso prolongado.
De las mujeres que se entrevistaron para el informe, alrededor de 28% de las toallas sanitarias que se utilizan han sido donadas por alguna organización civil, mientras que 72% las han comprado ellas.
En cuanto a las barreras de infraestructura, el acceso al agua es otra condición indispensable para la gestión menstrual digna. El informe sobre mujeres en condición de calle mencionó que las mujeres en situación de calle tienen que acudir a parques públicos donde hay tomas de agua o pagar cinco pesos para acceder a una toma de agua en algún baño público.
“Hay un checador de unos camiones, y ahí el señor tiene una llave, igual tiene ahí un baño chiquito donde entra la gente. Igual también en el parque hay una llave de la que agarraban los de los puestos, y de ahí se puede agarrar agua”, narra una mujer en situación de calle.
Conapred recalca que otra barrera de acceso a salud sexual es la estigmatización de la menstruación y creer que es sucia, pues las mujeres de este sector suelen ser discriminadas por esta situación.
Menstruación, un asunto público
La presidenta del Copred menciona que esta situación de pobreza menstrual no es exclusiva de las personas que viven en la calle, pues en México 4 de cada 10 mujeres vive en la pobreza y comprar un tampón o toalla sanitaria puede ser un producto que descarten si se compara con otros productos de canasta básica para la alimentación.
La representante mencionó que hasta hace un año las toallas sanitarias eran vendidas con el cargo IVA, lo que implicaba “verlas como un producto de lujo”.
Por su parte, la diputada Marisela Zúñiga, del grupo parlamentario Morena, quien también estuvo presente en el evento, mencionó que mientras las niñas no tengan acceso a toallas o tampones, las mujeres privadas de la libertad carezcan de productos y de agua y las mujeres en calle usen productos no higiénicos “estaremos lejos de garantizar derechos en igualdad de circunstancias”.
Durante su participación presentó una iniciativa para modificar la Ley Federal del Trabajo a fin de considerar una licencia menstrual. Se comprometió a impulsar desde el legislativo que las mujeres en situación de calle y en reclusión puedan acceder de manera gratuita a artículos de gestión menstrual.
«Me llevo el compromiso de impulsar desde el Congreso de la Ciudad de México que las mujeres en situación de calle y en reclusión puedan acceder de manera gratuita a artículos de gestión menstrual».
https://laverdadnoticias.com/mexico/Gestion-menstrual-dificultad-para-mujeres-que-viven-en-la-calle-20230310-0267.html
