En las leyes federales se dejó fuera la obligación de brindar derechos a las trabajadoras del hogar por prejuicios de clase
Las trabajadoras del hogar han quedado excluidas de los derechos de seguridad social por un conjunto de creencias y prejuicios que son discriminatorios.
Ideas como que “las empleadas domésticas son ignorantes, tontas” o “se les hace un favor” en contratarlas está detrás de las leyes que por décadas han regido en México. ¿Por qué han sido excluidas de estos derechos?
La Ley Federal del Trabajo y la Ley del Seguro Social han determinado que no son sujetos de aseguramiento al régimen obligatorio quienes realizan trabajo doméstico.
Estas leyes han sido diseñadas bajo narrativas que han permeado a la sociedad por años, como explica Diego Rodríguez Eternod, licenciado en políticas públicas por el Centro de Investigación y Docencia Económicas.
Artículo 49.- El patrón quedará eximido de la obligación de reinstalar al trabajador, mediante el pago:
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IV. En el servicio doméstico…
Ley Federal del Trabajo
En el ensayo “Re(gu)laciones desiguales: las narrativas del trabajo doméstico remunerado”, reconocido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el concurso sobre Igualdad y Género en 2017, el egresado del CIDE destaca que hay un conjunto de creencias en torno al trabajo doméstico que ha afectado los derechos de estas trabajadoras.
En principio, el 90% de quienes realizan el trabajo doméstico son mujeres, por lo que la legislación vigente tiene un efecto discriminatorio en cuestión de género.
Rodríguez explica que el trabajo doméstico no tiene valor o se considera que cualquiera puede hacerlo, por lo tanto, anula los derechos de quien lo lleva a cabo.
Todos los estereotipos en torno a las mujeres que desempeñan el trabajo doméstico han influido, argumenta, para que en la ley no se haya considerado obligatorio que estén afiliadas al Seguro Social. “El trabajo doméstico no es considerado un trabajo socialmente valioso y es un trabajo que no permite la movilidad social”, dice.
Otra creencia sobre las empleadas del hogar es que “son tontas” o “ignorantes” y que hay que explicarles las cosas.
“Que estas mujeres se dediquen al trabajo doméstico por falta de alternativas laborales o por necesidad de recursos, no significa que no sepan hacer nada o que sean ignorantes”, destaca el autor.
Es más, se cree que “se les hace un favor al contratarlas”, por lo que “deberían de estar agradecidas”. De ahí vienen frases como que la empleada «es una malagradecida”.
Estigmas, como que “son flojas” o “rateras” están en las narrativas de telenovelas y programas de televisión, en las películas y otros medios, cuando que estas conductas no son exclusivas de una función laboral. Todo empleado es sujeto de caer en ellas.
Señala otro falso argumento que ha librado a los patrones de brindar esta protección, y es que pagar una cuota de seguridad social puede afectar a la economía del hogar y la familia, y este debe protegerse. Pero quien puede pagar una empleada doméstica tiene, sin duda, más recursos que la trabajadora, quien suele vivir en situación de pobreza.
También se consideraba que el hogar “es un lugar seguro” y no enfrenta situaciones de riesgo.
El trato a las empleadas domésticas también conlleva una fuerte violencia de género. Al menos el 12% de las empleadas del hogar ha sido víctima de acoso sexual y un 9% ha llegado a ser despedida ante casos de embarazo, según una encuesta del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, realizado en 2014.
El especialista en políticas públicas explica que esta narrativa es la que influye en la forma de hacer las leyes y limita la movilidad social y los derechos de las trabajadoras domésticas. Esto está por cambiar.
La sentencia emitida por la la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en diciembre de 2018, obliga al IMSS a implementar un programa piloto para afiliar a la trabajadoras domésticas en México.
El Instituto Mexicano del Seguro Social tiene año y medio —a partir de diciembre de 2018— para implementar implementar un programa que sea fácil para los empleadores y que les permita tener acceso a derecho que se les han negado.
Artículo 13. Voluntariamente podrán ser sujetos de aseguramiento al régimen obligatorio:
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II. Los trabajadores domésticos…
Ley del Seguro Social
En ese plazo, deberá proponer al Congreso de la Unión las reformas necesarias para incorporar a un sistema especial de seguridad social a las trabajadoras del hogar y, en un plazo no mayor a 3 años, lograr que todas estén afiliadas.
Este domingo, el director general del IMSS, Germán Martínez, dará a conocer los requisitos para que el registro comience el 1 de abril.
