Leydi Lucero Morales Arroyo, acaba de cumplir 21 años, el 8 de mayo es su cumpleaños. Tenía un hermoso bebé de 5 meses.
En las fotografías se les mira hermosos y felices, pero desde el 9 de marzo de 2019 están desaparecidos. La madrugada de ese sábado se encontraban en su casa ubicada en la Privada de Cagliari en Atotonilco de Tula, Hidalgo, pero sujetos ingresaron y la sacaron con violencia. Entraron por la ventana ya que no tenía vidrio, rompieron el plástico que tenía y la sacaron con todo y su bebé. Se los llevaron.
El presunto culpable; Oscar de Jesús López Camarillo, padre de su hijo y expareja, un hombre celoso, machista, psicópata. Lo conocía desde hace unos años, ella se metió a trabajar al ‘sardinero’ donde hacen despensas, y él era sardinero. Leydi se enamoró pues no pensó que sería un mal hombre.
Oscar le causó mucho dolor a Leydi, la maltrataba psicológica y verbalmente. Estando embarazada la tenía trabajando, lavando carros en el estacionamiento de Walmart, sin importarle que hubiera comido y que estuviera bajo el sol.
De acuerdo con información de su hermana, cuando se enteró de la desaparición de Leydi, Oscar fingió preocupación y arrepentimiento por haberla maltratado, pero nadie se lo creyó. Aseguran que él es el que está detrás del secuestro. La familia de Leydi pide que se entregue y lo investiguen, hasta el día de hoy no ha movido un dedo por tratar de encontrar a su hijo.
